miércoles, 20 de mayo de 2020

te soñé otra vez

y te sentías tan familiar, a pesar de que nunca te volví a tocar.

y conocía cada rincón de tu casa, a pesar de que nunca te visité

y te besaba como si fuera costumbre, a pesar de que no lo es.


mis manos se envolvían en tu cabello y tu olor invadía mi memoria, y sé que eres tú pero no te puedo ver la cara.


y sé que eres tú pero tú no vives en una casa, 

sé  que eres tú pero él tú real no me quiere.


y doy vueltas mientras bailo con poca gracia en el suelo de madera de tu cuarto y tu cama espera con ansias que nos acerquemos. 


escucho ruidos de fondo que me dicen que no estamos solos y me confundo: tú vives solo.


soñé en ti y en la idea que quiero que seas, en como quiero que me quieras. 

soñé en ti y en la vida que creé para ti.


y despacio te vas alejando sin mostrarme nunca tu cara y me quedo con el ambiente inventado que me ahoga con la afirmación repetitiva de que estás ahí pero no eres tú. 


Se vuelve gris y las voces gritan hasta dejarme sorda, hasta que me quedo en un vacío, oscuro, silencioso y sola.